Corrupción del PP

Un nuevo caso salta a la palestra, después del anuncio de la acusación del exministro Cañete en el caso Acuamed

Hoy se ha efectuado una macro redada en el PP Valenciano en la que se señala la responsabilidad de altos cargos del PP entre ellos la ex alcaldesa Rita Barbeá que no hace mucho se permitía dar clase de honradez a los demás.

Pero el PP y sus dirigentes (algunos en el punto de mira de causas judiciales abiertas),  siguen sin dar la cara, medio partido imputado, montones de militantes acusados y nadie da la cara. 

Triste es la imagen del país que no reacciona ante la corrupción de sus políticos y sigue votándoles pase lo que pase.

Triste es el país que mantiene a sus políticos con pensiones vitalicias no incompatibles con cargos en consejos de administración de hidroeléctricas y petroleras mientras reclama a una anciana 24000 euros por cobrar 90 euros al mes por dar unas clases para adultos en el ayuntamiento de su pueblo con un beneficio final obtenido de 2000 euros después de que el mismo ayuntamiento consultara con hacienda si era legal o no obteniendo la respuesta de que si era legal.

Triste es el país en el que el fiscal general aboga por la suspensión del juicio i posterior condena para la mujer de un imputado cuando dicha mujer pertenece a la clase alta alegando que no sabía nada de las actividades de su marido y sin embargo mete en la cárcel a la mujer de un alcalde alegando que era imposible que no supiera nada.

Muy tiste el país en el que la justicia mide con diferente rasero a los ciudadanos, rasero fino para unos, rasero grueso para otros.

Necesitamos una revolución de pensamiento, no una revolución política, no me sirven los que llegan prometiendo maravillas para caer en las mismas reglas en cuanto pueden, (familiares, amiguetes, novias y demás en cargos importantes o con subvenciones)

Necesitamos una revolución de pensamiento que meta en la cárcel a los políticos, banqueros i/o empresarios que se saltan las leyes y generar confianza más que en los mercados en la población.

Si seguimos así tendremos lo que merecemos, ruina, vileza política y miseria para las clases más desfavorecidas que somos todos ya que la clase media está desapareciendo.